Esta exposición presenta más de un centenar de dibujos de Rosario Weiss (Madrid, 1814-1843), así como algunas estampas y pinturas de la autora. Con este conjunto se quiere mostrar la obra de una dibujante excepcional, más conocida por su relación con Francisco de Goya (1746-1828) que por su condición de artista.

Weiss vivió con su madre, Leocadia Zorrilla, y Goya en la Quinta del Sordo entre 1820 y 1824, y desde ese año en Burdeos, donde la familia permaneció hasta 1833. Comenzó a dibujar gracias a los esbozos que el pintor aragonés hacía para que ella los copiara o completara hasta que, hacia 1825, entró en la escuela pública de dibujo que Pierre Lacour (1778-1859) dirigía en la ciudad. Su formación francesa atemperó la expresividad de sus primeros pasos junto a Goya, dirigiéndolos hacia el trazo preciso, limpio y ordenado que entonces predominaba en Francia, a la manera de Ingres.

De vuelta en Madrid, desarrolló una breve pero intensa carrera profesional, compaginando la copia de pinturas de grandes maestros con los retratos a lápiz de escritores y personajes de la burguesía liberal. Weiss –que fue además una excelente litógrafa– también dibujó del natural apuntes de plantas y árboles, así como paisajes idealizados con castillos, lagos o ruinas.

Weiss fue una de las pocas mujeres que ingresó, como académica de mérito por la Pintura de Historia, en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, y en 1842 alcanzó su máximo reconocimiento cuando fue designada maestra de dibujo de Isabel II y de su hermana, la infanta Luisa Fernanda, cargo que desempeñó durante muy poco tiempo, pues murió de cólera al año siguiente.

La muestra, comisariada por Carlos Sánchez Díez, reúne obras de la Biblioteca Nacional, el Museo Lázaro Galdiano, la Bibliothèque municipale de Bordeaux, el Museo del Prado, el Museo del Romanticismo y colecciones particulares, junto a piezas de otros museos e instituciones públicas españolas.

Ver catálogo
Ver noticias de la exposición
Carlos Sánchez Díez presenta la exposición